ACASO ES CIEGO EL AMOR?.....
Dicen que cuando quieres a alguien, cuando estás enamorado ciegamente, no sueles ver los defectos de esa persona que absorbe constantemente tus pensamientos, tu tiempo.
Las horas pasan sin querer, y sigues siendo tan incapaz de levantar la cabeza y mirar adelante como siempre, tal vez no estás preparado aún para olvidarle, tal vez no quieres hacerlo, ni siquiera lo has intentado...
Recuerdas cada conversación, cada mirada, cada ilusión, y te niegas a cerrar capítulo, te crees fuerte para seguir, sin pensar que te estás haciendo daño, sin darte cuenta de que albergas una esperanza que, probablemente, no tenga ni pies ni cabeza, que, seguramente, llegará a dolerte mucho, demasiado.
Te sientes bombardeado en gran cantidad de ocasiones, "no te quiere", "olvídalo", "se está riendo de tí"... y la impotencia que experimentas al tratar de defenderle te angustia, porque te enfurece que les encanta machacarle, sin ni siquiera conocerlo realmente, sin vivir la situación desde dentro, haciéndolo desde fuera.
A veces, da la impresión de que es capaz de mover el mundo con las yemas de sus dedos, con la profundidad de su mirada y la sencillez de sus palabras. Pero todo esto puede malinterpretarse bajo el punto de vista de personas que creen que sus dedos son lanzas, que su mirada tan sólo transmite egoismo, y sus palabras maldad.
¿cómo no ver al niño que lleva dentro? ¿cómo no ver la bondad y la picardía que tantas veces tu has percibido y disfrutado? ¿cómo pueden traducirlas en todas esas barbaridades que constantemente dejan caer?
No logras entenderlo, simplemente tratas de justificar su comportamiento, intentas demostrarles que en el fondo te quiere, que siempre lo ha hecho de un modo u otro, que nunca seria capaz de humillarte ni de hacerte daño, es así, sólo tu comprendes su forma de ser, sólo tu sabes que no es un trozo de piedra; que tiene corazón, sentimientos... La visión que tienen con respecto a su persona es tan equivocada,te hieren tanto sus palabras...
Pero sigues peleándote por defenderlo, sigues llorando en silencio por haberle perdido, por tener que llorar su ausencia, esa susencia que hoy por hoy te mata , pues lo que realmente anhelas es su calor, su cariño, su presencia... No obstante no te queda otra opción, y te aferras a él, queriéndolo como siempre lo has hecho, disimulando ese brillo en los ojos que casi siempre te delata cuando lo mencionas, cuando escuchas su nombre... al fin y al cabo es parte de tu vida, y en el fondo sabes que siempre lo será.
Odalys
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